POR LAS SENDAS NEVADAS DE CAMORRITOS Y SIETE PICOS.

El invierno nos ha susurrado durante esta semana que pronto estará entre nosotros, el mensaje nos lo ha dejado en forma de bolsa de aire frío que nos ha dejado congelados. Pero también nos ha dejado la sierra cubierta de un manto de nieve espectacular que hemos decido disfrutar andando.

He quedado a las 10:00 en cercedilla con Toni, Raquel y JJ para disfrutar de la montaña, hace una semana que no toco la bici y empiezo a tener mono, tanto de bici como de montaña, la ciudad me deprime en exceso así que a la minima que puedo me escapo. Subimos en el coche de Toni hasta camorritos, nos abrigamos bien comenzando a subir por una calle de las urbanizaciones, cuando me doy cuenta que no he encendido el GPS por eso el track esta tan a tras, es que uno esta más atento a los guantes, el gorro el abrigo y a las placas de hielo que están pelín peligrosas. Una vez que nos adentramos en las veredas, la protagonista es la nieve que esta blandita, seguro que esta noche a caído un poco y en cantidad, se anda genial , el paisaje es espectacular, subimos por el GR-10, que buena pinta tiene esta bajada cuando no se ven las piedras que hay debajo, hoy estaba de lujo para un descenso con la bici, jejejeje. El cielo esta luchando entre nubes y claros, nos regala bocanadas de sol pero nos castiga velando siete picos con un telón de nueves aterciopeladas que da la sensación de despejarse de un momento a otro y dejarnos ver un paisaje asombroso, subimos a buen ritmo, Toni tanto en bici como andando nos hace sudar la gota gorda , empezamos a tener calor. Hemos ganado altitud y la vista de las zonas bajas de la sierratotalmente nevadas dejan una paisaje de postal, el sol resalta los pantanos que nos deslumbran como si fueran espejos. Raquel quiere sacarse unas fotos con su equipación recién estrenada del foro femenino de Mtb y la verdad es que no hemos encontrado mejor fondo para que RAD luzca sus prendas.

Ascendemos por el PR-7 hasta casi el pico de Majalasna para continuar hasta la fuente de Anton Ruiz de Velasco, en donde Toni llena su cantimplora de agua y el resto nos damos cuenta que tenemos el tubo del Camel congelado por lo que no sale ni gota de agua. A esta altura la cantidad de nieve acumulada en algunas zonas nos hunde hasta la rodilla, nos hacemos unas fotos y dejamos la pradera

del Collado Ventoso para seguir una senda alucinante con unos pasos complicados por el hielo y la nieve en algunos puntos hasta desembocar en la pista de la fuenfría, la cual seguiremos hasta el refugio de aurrulaque, en el que nos desviamos para bajar por un sendero que se supone esta bajo nuestros pies.

Terminamos de bajar la fuenfría por la vereda alta y recorriendo algunas de nuestras veredas favoritas vamos recordando anécdotas de otras rutas terminamos a eso de las 14:30 en el coche de nuevo. Hemos vivido una mañana de domingo muy divertida disfrutando de una vistas increíbles, que aun conocidas, cuando se visten de blanco no dejan de sorprendernos.

Track de la ruta.